Preparar palomitas caseras es mucho más fácil de lo que parece, sobre todo, con un palomitero. Es un pequeño electrodoméstico que ocupa poco espacio y que hace unas palomitas perfectas en 2-3 minutos. Lo mejor es que no necesitas poner grasa para que se hagan y no se queman porque funciona con aire caliente. Yo pensé que apenas lo usaría, pero es tan cómodo que no me da pereza.
Una vez que tengo las palomitas hechas, las doy distintos sabores, dulces y salados, de forma muy sencilla. Sirve casi cualquier alimento en polvo: no solo las especias, también queso curado, galletas, frutos secos... Combina tus favoritos, impregna y tendrás palomitas de sabores. En el paso a paso te cuento cómo.
Por cierto, que tenía ganas de enseñaros mi nueva encimera de Inara. Es de un material llamado Fénix, una superficie mate en la que nunca se marcan las huellas y que se limpia solo con agua. Además, es antibacteriana y muy, muy resistente: a la abrasión, al calor seco y hasta a disolventes de uso doméstico. Es una maravilla y la hay en un montón de colores. Pero lo mejor es que, en caso de que sufra pequeñas marcas o arañazos, se puede reparar con el calor de la plancha.
¿Tienes ganas de probar esta receta de palomitas de sabores? ¿De qué las harás?
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